Caía la última noche del mes de enero de 2024 y los ‘trashers’ se daban cita en el Foro Veintiocho para recibir una sobredosis de poderoso thrash metal a la cara y en directo de parte de dos grandes exponentes íconos del género y pioneros del metal estadounidense.
La noche se hacía predilecta entre el público entrando al recinto y las cervezas que se acumulaban en los cuerpos de los seguidores de este rápido género del metal.
Pasadas las veinte horas, hizo su presencia sobre el escenario del recinto Exhorder, la banda de Nueva Orleans, Luisiana se erigía para comenzar con un set y calentar al público con canciones como “Incontinence” y “Slaughter In The Vatican”.
Un set poderoso lleno del tradicional thrash metal de antaño y del conocido groove metal del cual esta banda es considerada la pionera del género.
Entre canciones antañas, hasta estrenos de lo que será su próxima producción, la banda liderada por Kyle Thomas, recetó a sus seguidores con una poderosa dosis por parte de los músicos que lo acompañaban como Jason VieBrooks en el bajo y Sasha Horn en los rápidos y enérgicos tamborazos.
La banda cerró la noche con un par de canciones de su “Slaughter in The Vatican” de 1990, las cuales fueron “Exhorder” y “Desecrator” que dejaron completamente satisfecho a sus seguidores.
Con los ánimos bien calientes, el público recibió a la segunda banda del menú de la noche. Vio-lence hacía presencia en el escenario del Foro Veintiocho entre gritos y el cantico de ‘¡¡VIO-LENCE, VIO-LENCE, VIO-LENCE!!’ de parte del público capitalino que ansiaba la presencia de los californianos.
Con un intempestivo inicio, la banda entonaba ya las icónicas canciones que los hicieron estandarte desde su fundación en 1985 y de su aclamado “Eternal Nightmare”.
Los éxitos seguían cayendo a cada minuto de la noche del 31 de enero y la intervención del vocalista Sean Killian para decirle a su público, ‘El nombre de nuestra banda es violencia, quiero ver violencia, vine a ver violencia’, introducción que dejaba la puerta abierta para la interpretación de “Kill On Command” y que abría de nueva cuenta y ahora más grande el cirlce pit del lado derecho del recinto.
Incendiando el escenario y la pista, la banda desató toda su ira entre las guitarras de Ira Black y Phil Demmel a cada canción, el público no paró de corresponderles durante la velada entera.
Un set que se escurrió como agua entre las manos, Vio-lence dejó un maravilloso sabor de boca para sus seguidores y los asistentes a este magno concierto.
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